Mumpy Sarkar del pueblo de Jhorpara, en Bengala Occidental, India, dejó una nota que iba dirigida a su madre, en la que pidió que sus ojos y los riñones se utilizaran para el tratamiento de su padre y su hermano.
La muerte de su hija y la verdadera razón de su suicidio dejaron inconsolable a la familia. La madre de Mumpy se encuentra en estado de shock. Mientras que su padre ha dicho: “Muy tarde comprendimos los sentimientos de un niña muy sensible”.
La estudiante de secuendaria había escuchado en una discusión de sus padre sobre cómo sólo la cirugía del ojo podía restaurar la visión de su padre y un transplante de riñón la vida de su hermano, de modo que tomó esa trágica decisión.
El plan de la niña no sólo incluía que ella se suicidara, sino que incitó a su hermana mayor que hiciera lo mismo por la “causa”, pero su hermana no le creyó y la tomó como broma. Mónica, su hermana mayor, se marchó al escuela, su padre estaba trabajando y su madre había salido a buscar arroz.
El pasado 27 de junio, cuando Mumpy se vió sola tomó Thiodan, un pesticida. Entonces corrió al encuentro de su padre, que estaba a medio kilómetro de distancia. Le dijo que había soñado que alguien había vertido veneno en la boca y le dolía el estómago. Su padre, alarmado la llevó a una farmacia local inmediatamente, donde le dieron algunos medicamentos.
Pero su condición empeoró rápidamente y tuvo que ser trasladada al hospital local. A partir de ahí, fue enviada al hosptial de Anulia, a 40 kilómetros de distancia. Pero los médicos la declararon muerta.
Como es la tradición en la India, la niña fue cremada, sin saber que quería donar sus órganos. Lo supieron un día después cuando su padre vió la nota en la cama.
Ahora el Consejo de Estado representativo de la India prometió ayudar financieramente el tratamiento del señor Sarkar y su hijo, reporta el Daily Mail.
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