Victoria’s Secret y el Photoshop...

El retoque digital es un recurso más que habitual en publicidad, especialmente cuando se trata de campañas que se apoyan en una cara bonita o un cuerpo espectacular. El empleo de Photoshop es tan común que podría decirse que el público lo tiene ya prácticamente asumido y aceptado. Pero todo tiene un límite…

Cuando una marca se excede con el retoque se produce siempre una fuerte reacción en contra, mitad burla mitad denuncia, que inunda las redes sociales de comentarios sobre el despropósito. Una de las firmas que se ha visto envuelta en varias polémicas de este tipo es Victoria's Secret, algo de lo que no parece haber aprendido.

La marca de lencería más famosa del mundo colgó recientemente en su página de Facebook una imagen para promocionar su nueva línea de ropa de baño. En ella se ve a todas luces que al diseñador se le fue la mano en su intento por adelgazar a la modelo. Las caderas y las piernas tienen una curvatura 'sospechosa', y las nalgas de la protagonista parecen haber desaparecido por arte de magia.

La figura está tan distorsionada que cuesta creer que realmente se les haya pasado por alto. De hecho, una de las teorías que circula por la red es que Victoria's Secret genera estas polémicas voluntariamente debido al gran impacto mediático que consiguen a coste cero. Viendo la repercusión que ha tenido la controvertida fotografía, no parece un planteamiento descabellado. La imagen tiene ya más de 2.000 comentarios y 30.000 'me gusta', y la marca no parece muy dispuesta a retirarla reconociendo así que se trate de un error.

El exceso de Photoshop en algunas campañas ha motivado incluso que el organismo regulador de la publicidad en el Reino Unido exija su retirada, como ocurrió con unos anuncios de Lancôme y Maybelline, entre otros.

Una firma reincidente

Resulta sorprendente el número de veces que Victoria's Secret se ha visto envuelta en polémicas debido a su deficiente uso de los programas de retoque fotográfico. Especialmente sonado fue el caso de la modelo sudafricana Candice Swanepoel, que apareció en una de las publicidades de la firma con unas caderas y una cintura que no encajaban por ningún lado.

No menos llamativa fue otra imagen de la marca de lencería en la que adelgazaron tanto las piernas de una modelo que el resultado final llegaba a dar hasta miedo. Ambos trabajos eran sin duda mejorables, y según la opinión de muchos consumidores, innecesarios porque la gente quiere ver mujeres reales.